Fundación de OldCarucedo, 1855
Testimonio de Harry
Old Carucedo, 14 de Septiembre de 1.865
Ya han pasado diez años desde que el bueno de Jake O'Bennet llegase a estos andurriales para fundar el pueblo de OldCarucedo en honor a su tierra natal, allá en la vieja Irlanda, Carucedo. Comerciantes, mineros, familias, tahúres, pistoleros, putas y buscavidas llegaron desde el Este en carretas: mi padre estaba entre ellos. Empezaron a construir casas y a ganarse la vida. Fue entonces cuando construyeron el salón. No es mala tierra, bien lo sabe Dios; aquí se da el ganado, e incluso dejamos vivir a los pastores de ovejas, no sé cuándo lincharon al último, pero ya hace tiempo. Tener un ojo sobre la veterinaria, eriza de buen ver, pero mal fiar… cuidado con el tomahawk de la vaporosa dama, amigo. También encontraron algunas zonas perfectas para la minería. Mi padre empezó a ganar dinero, mucha gente pasaba por aquí, ya sabes, a tomar una copa después de un duro día deslomándose al sol, reñir con la parienta y aguantar al cuñado. Bebían mucho, santa Madre del Amor Hermoso, la gente de antes sí que achicaba. El pobre Jake O'Bennet murió una noche, se lo llevaron unas terribles fiebres. Terminó sus días rodeado de sus seres queridos. Fue velado por todo el pueblo, hasta Lulú Sietepolvos echó una lágrima por él. El pueblo empezó a prosperar, y creció rápidamente. Old Carucedo era un lugar agradable y con futuro. Fdo. Harry, barman del salón |